sábado, 3 de noviembre de 2012

Acto VI.- Tempestad


Después de haber corrido sin destino, se encontraba en un área que no le era familiar en la noche, Taemin se encontraba completamente perdido. Llamó un taxi.

Los taxis de Londres son los mejores en el mundo--- solo hay que darles la dirección y ellos te llevan directamente a donde sea que vayas.

Taemin mostró la tarjeta de presentación que el hombre de ojos grandes y cabellera azabache  le había entregado al conductor del taxi.

Termino en unos residenciales de clase alta cerca del Parque Regency. Pagó la tarifa del taxi con la propina que había recibido, pero aun así quedaba bastante dinero.

Al salir del taxi, Taemin se quedó admirado ante el edificio de apartamentos tan lujoso. La entrada estaba llena de luces y un portero uniformado junto a ellas.

“Vaya directo al quinto piso,” le dijo el portero después de revisar la dirección. Apuntó hacia donde se encontraba el elevador en la parte de adentro.

“Gracias,” contestó Taemin mientras avanzaba hacia al elevador.

Paso por un lobby inmaculado rodeado por paredes de mármol.
En el interior, el edificio parecía ser más un hotel de lujo. Aun cuando la gente caminaba por el piso con zapatos de exteriores, gruesas y lujosas alfombras estaban dispersas a través de cada centímetro del suelo. Un candelabro gigante colgaba del techo, iluminaba con una luz radiante. Aquí y allá, habían floreros decorando el salón tan altos como una persona, mostrando asombrosos arreglos florales.

Taemin ingresó en el elevador y presionó el botón para llegar al quinto piso.

Estaba invadido por el sentimiento de que no pertenecía a ese lugar. Pero había aceptado la propina del hombre rico, así que debía entregar el mensaje de que Brenda había fallecido. También se encontraba el asunto del anillo.

Las probabilidades apuntaban a que este hombre era el verdadero dueño del anillo.

Las puertas del elevador se abrieron, había una única puerta de madera al final del pasillo.

Taemin presionó el timbre que se encontraba a un lado de la puerta. Pero el que abrió no fue el hombre de ojos grandes, si no era el hombre de cabello negro.
“Eres el niño del bar ¿Necesitas algo?” el hombre le preguntó, viendo a Taemin de manera sospechosa.

Taemin no lo había notado en el bar, pero este hombre era en su propia categoría bastante atractivo. Debajo de su cabellera negra se encontraban unos ojos café aunque tenía cara de perrito. Pero el carisma del hombre rico era tan sobrecogedor que, a la par de él, los encantos de su amigo eran hechos de menos.

“He venido a decirles que Brenda falleció,” Taemin dijo. “Yo mismo me acabo de enterar. Ella me entregó algo antes de morir.”

No estaba seguro si el hombre sabía lo que estaba sucediendo, pero tomó el anillo de su bolsillo y lo sostuvo frente al hombre.

Los ojos del hombre se abrieron y observaron del anillo a Taemin y de regreso.

 “¿Sabías que este anillo es la reliquia familiar de la familia de Lord Choi?” le preguntó.

“¿Es la reliquia de un lord?” Taemin preguntó de regreso, repitiendo las palabras desconocidas.

“Si, así es” el hombre dijo. Después de dudar un poco, agregó
“Será mejor que entres”
Era difícil negarse al tono de invitación empleado por el hombre.
“¿A caso piensa que he venido aquí a estafarlos?”

Taemin se sintió molesto, pero como ya había venido tan lejos, no podía darse por vencido. Asintió y siguió al hombre al interior del apartamento.
La habitación era espaciosa y tenía un techo bastante alto como en el lobby.

 Pero en contraste con la iluminación del lobby, la habitación estaba oscura. Pasaron por varias habitaciones vacías antes de alcanzar la que tenía una persona en ella.

Una cama doble había sido colocada en la habitación, y parecía ser un cuarto. El hombre rico y de cabellera azabache que Taemin había visto en el bar estaba esparcido en un sofá, un vaso con un líquido ralo color café posaba en su mano.

“Minho, tienes un visitante,” el hombre con cabello negro le dijo al hombre castaño.

“Pero miren, si es la niña linda del bar,” sin levantarse, el castaño llamado Minho volvió la mirada a Taemin y sonrió. Se movió lentamente y un aire de decadencia provenía de él.

“De hecho no soy una chica. Soy un chico.” Taemin lo corrigió inmediatamente.

Por su nombre, era frecuentemente confundido por ser una chica incluso en corea. Y eso no parecía haber cambiado al venir a Inglaterra, pero era más humillante ser confundido por su cara que por su nombre.

Minho se le quedo viendo. Aparentemente no creía lo que Taemin decía.
“Lo siento” dijo después de una pausa.

Tal vez notando el desagrado de Taemin, Minho lanzó una sonrisa junto son sus disculpas.

 Taemin sintió que Minho se estaba burlando de él y se molestó aún más, pero recordándose a sí mismo que no había venido a discutir, trató de calmarse. No estaba acostumbrado a ser provocado.

“Verás, lo que sucede es…” y le contó a Minho lo que había pasado, la razón por la que había venido y le entregó al hombre su anillo.

La risa de Minho lo interrumpió de manera inesperada.

“¿Escuchaste eso Jonghyun?” dijo de una manera bastante alegre.
“Mi plan falló bastante rápido.”

Taemin sintió ofensa en la forma de hablar de Minho. El hombre parecía estarse burlando de la muerte de Brenda.

“No me sorprende,” dijo el hombre de cabello negro llamado Jonghyun.

“Bueno, si el anillo te pertenece, te lo entregaré,” dijo Taemin,
“De otra forma lo llevaré a la policía.”

Quería salir de ese lugar lo más pronto posible. Su paciencia tenía su límite. Jonghyun no parecía muy a gusto con su actitud a la defensiva, y Minho no parecía ser la clase persona con la que Taemin quería relacionarse.

Además, con todo lo que había sucedido estaba muerto del cansancio.

“Oh, es definitivamente mío,” Minho le aseguró, “Se lo entregué a Brenda hace dos años.”

Taemin le entregó el anillo. “Entonces te lo devuelvo.”

Minho tomo la mano extendida de Taemin y deslizo el anillo por uno de sus dedos. Taemin estaba confundido.

“Este anillo es una herencia de mi familia.” Ignorando la reacción de Taemin, Minho le dijo la misma historia que Jonghyun le había dicho antes, “Cuando entregamos esto, lo hacemos únicamente a aquellas que se convertirán en nuestras prometidas.

 Por cierto ¿eres de china?”
“Soy coreano” Taemin le contestó.

“¿Viniste a Londres de paseo?” Minho preguntó.

“No, estoy estudiando aquí, en una escuela de baile,” Taemin explicó.
“¿Baile?” Minho repitió, encantado. “¿En serio? Y ¿tu nombre?”
“Lee Taemin.”

Taemin le dijo a propósito su nombre completo y en el orden coreano.

 La mayoría de británicos no estaban acostumbrados a los nombres coreanos y les era difícil recordarlos bien después de tan solo escucharlos una vez. No iba a ser amable y deletrearle su nombre a este hombre tan arrogante.

“¿Es Lee Taemin tu primer nombre?” Preguntó Minho.
Taemin cedió un poco. Nadie había sido capaz de pronunciar su nombre tan bien.

“Lee es el nombre de mi familia. Taemin es mi primer nombre.”

“Taemin,” Minho murmuró “Que nombre tan maravillosamente exótico. Y los asiáticos son tan atractivos. ¿No te parece así Jonghyun?”
No mostraba señas de soltar la mano de Taemin.
Todo lo que Jonghyun hizo fue encoger los hombros.

“Disculpe” Taemin dijo.

Estaba comenzando a sentirse atrapado. Nadie había sostenido su mano por tanto tiempo. Cuando intentó quitar su mano, Minho estrechó su mano con mayor intensidad.

El hombre estaba sonriendo, parecía estar disfrutándolo.

¿Se estaba riendo ante la incomodidad que sentía Taemin?
Taemin se enfureció más ante este pensamiento. Pero no sería muy maduro de su parte el perder su temperamento justo después de conocer a alguien, así que recuperó su compostura.

“¿Qué te parecería volverte mi prometida?” Minho preguntó súbitamente.
“¿Tu prometida?” Preguntó.

Comenzaba a perder su confianza en su habilidad para entender el inglés. No entendía a qué se refería Minho.

“Como te parece,” Minho explicaba, “Estoy obligado a casarme con alguien en el que no tengo ningún tipo de interés, y para evitar eso, estoy buscando por una prometida falsa. Dijiste que ¿estás inscrito en una escuela de Baile?”
Taemin asintió “Si.”
Minho concluyó “¿Qué te parece? Te pagaré 300 libras por día para que pretendas ser mi prometida. Creo que es un trato bastante bueno.”
“Buena idea,” Jonghyun se intervino en la plática, “Este chico se vería genial vestido de mujer.” Se rió tanto que tuvo que sostener su estómago.
“Esperen un momento,” Taemin protestó. “Soy un hombre. Y ¿por qué debería ser tu prometida falsa? Estoy seguro que puedes encontrar un montón de mujeres elegibles.”

Minho sonrió amargamente.
“No creo que funcionaría”
“La mayoría de mujeres no se detendrían solo a pretender ser la prometida de un hombre rico, atractivo y aristócrata,” Jonghyun explicó.

Minho suspiró fuertemente. “Estábamos planeando preguntarle a Brenda. Ella era una prostituta después de todo. Ella hubiera entendido su posición.”

Taemin sintió como la sangre se le subía a la cabeza. Cuan patética parecía Brenda ahora, pensando de este hombre como su ¡Dios! Minho no solo la estaba menospreciando sino que la estaba insultando.

“No puedo hacerlo,” Taemin dijo fríamente. “Por favor busca a alguien más.” Entonces tiró su mano con fuerza para liberarse, se quitó el anillo del dedo y lo colocó sobre la mesa. “Ya te he devuelto tu anillo, así que ahora me voy a casa.”

No podía esconder el tono violento de su voz.

“Pareces molesto,” Minho le dijo calmadamente. “Deja que te lleve a casa como una disculpa.”

 “¡No gracias!” Taemin contestó inmediatamente.

La rudeza de Minho parecía ser un claro ejemplo de la técnica coloquial inglesa llamada “ingenio,” pero había ido demasiado lejos.

Taemin ya no quería formar parte en esta conversación. Ya había formado una mala opinión de Minho.

“Podrá verse bien, pero tiene un personalidad podrida.”

Minho sonrió victoriosamente “No seas tímido.”

Taemin en verdad quería decir no. Pero al final, terminó aceptando ser llevado a casa en el carro de Minho.

La razón principal era que no sabía cómo llegar a casa y era casi imposible conseguir un taxi en un área residencial y en medio de la noche.

Lo único que podía salvar la situación era que Minho había estado ebrio, así que Jonghyun era el que estaba llevando a Taemin a su casa.

El hombre del cabello negro era de por si un misterio, pero comparado con Minho parecía completamente normal.

“¿Te sientes un poco más calmado?”Jonghyun preguntó mientras conducía “Él no quería causar ningún mal. Solo recuerda que estaba ebrio y olvida todo lo que sucedió.”
“Brenda quería verlo tan desesperadamente. Pero las cosas que dijo…” Taemin confesó. No podía evitar quejarse.

“¿Cuál es tu nombre otra vez?” Jonghyun preguntó. “Taemin. Significa ‘Mayo’ en coreano, así que todos me llaman
‘May’ en su lugar.
“May, entonces. Yo soy Jonghyun Kim. Trabajo para un tabloide de tercera categoría.”
“¿Eres periodista?” Taemin preguntó.

Jonghyun asintió con la cabeza, entonces se quedó callado.

El carro se movía atravesando la noche.

Por la ventana, Taemin pudo contemplar que todas las tiendas estaban cerradas y que no había nadie caminando en las calles de la ciudad.

Jonghyun parecía estar concentrado únicamente en conducir y no mostraba signos de querer charlar, y Taemin también permanecía en silencio. Llegaron al edificio de Taemin sin intentar retomar la conversación.

“¿Podrías devolver este dinero por mí?” le pidió.
“¿Por qué?” Jonghyun quería saber.
“No existe ninguna razón para que yo lo conserve.” indicaba Taemin.
“Eres bastante honesto, ¿no es así?” Jonghyun remarcó. “De todas maneras, no creo que interese el dinero”

“A mi si me interesa,” Taemin insistió. “Únicamente utilicé un poco para pagar por el taxi para llegar a su casa.”

“De acuerdo.” Jonghyun aceptó el dinero. “Solo deja que te aconseje algo, ya que eres tan honesto. No te involucres con él.”

“Bueno, no creo volver a verlo nuevamente.” Taemin respondió.

“Eso esperemos,” Jonghyun dijo ambiguamente y después partió.

* * * * * * * *
Cuando llego al dormitorio, Taemin fue inmediatamente a su habitación y se tiró sobre su cama.

Sucedieron tantas cosas el día de hoy.

Había trabajado arduamente todo el día en la escuela y luego había ido inmediatamente a trabajar al bar. Eso normalmente lo dejaba exhausto.

Pero en la parte más profunda de la noche, había presenciado desde lo más bajos hasta lo más altos niveles de la sociedad londinense.
Y Brenda estaba muerta.

Su partida había sido tan prematura que aún no podía procesarla.

Ni si quiera podía visitar su tumba porque no sabía dónde se encontraba.

Y no quería regresar de nuevo a ese apartamento.

Al cerrar los ojos, una imagen del rostro atractivo de Minho flotó en su mente.

Si lo único que hubiera sabido era la apariencia de Minho, el hombre hubiera sido absolutamente perfecto. Era un verdadero aristócrata. Conocerlo hubiera sido una buena historia para cuando Taemin regresara a corea.

“Aunque probablemente jamás lo vuelva a ver,” Taemin se dijo a sí mismo.

1 comentario:

  1. Definitivamente no se llevo una buena imagen de Minho... y como no, con la forma en que se comporto...

    Gracias por el cp... ^.^

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